Recordando cuentos de la infancia.
Pero ahora que has crecido y navegas,
firme el rumbo, por todos los mares.......
OLOR A MAR
Llegas, como un huésped bravío de salud, hinchando mis narices de fuego oceánico. Soy, entonces, un potro rajado por la sangre, saltaría hasta las islas a revolcarme con las nubes, a morder los muslos de la arena, armando trampas de viento a las olas maduras ¡Oh, trastorno! Vibra la noche y vibra mi esqueleto, como un mástil, pidiendo la piel de noventa mujeres para velamen.
3 comentarios:
Estas un poquito nostalgico
Soy Mari Pili la del Biscuter, ahora tengo un mini
¿Has leído "el síndrome de Maripili, el miedo de las mujeres a no ser queridas, por Carmen Garcia Ribas.?
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